El iPhone 7 sale hoy a la venta en un buen puñado de países, entre ellos España y México (dicen las malas lenguas que lo han hecho así para que las ventas queden registradas en el actual trimestre fiscal). Y como en cada lanzamiento, iFixit se ha encargado de la ceremonial autopsia del teléfono.
Se encontraron con muy pocas sorpresas. El espacio que dejó la toma de auriculares de 3,5 mm ha sido reaprovechado para encajar el motor háptico Taptic Engine, que simula la presión del botón de inicio (que ya no es un botón). También hay una batería más grande, de 2900 mAh en el iPhone 7 Plus (en lugar de los 2750 del iPhone 6s Plus). Un pequeño incremento que, según Apple, aumentará una hora la autonomía del dispositivo.
Claro que además el procesador es más eficiente, con una arquitectura inspirada en big.LITTLE de ARM. El Apple A10 Fusion está fabricado exclusivamente por TSMC y promete bastante en los benchmarks. iFixit también confirma 3 GB LPDDR4 de memoria RAM firmada por Samsung en el iPhone 7 Plus (el iPhone 7 de 4,7 pulgadas se queda en 2 GB de RAM).
El terminal, con certificación IP67, está protegido aquí y allá contra las filtraciones de agua. Lo notaremos al extraer la bandeja de la SIM, que lleva una junta de goma tanto en el mecanismo que la expulsa como en la propia bandeja. Los inquietantes agujeros del altavoz también están protegidos.
En cuanto a las cámaras del Plus, las dos tienen el mismo sensor de 12 MP pero solo una (la de 28 mm) lleva estabilizador óptico de imagen. Se pueden ver los cuatro imanes del estabilizador en esta radiografía del sistema:
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