Cerca de 150.000 personas siguen este lunes desplazadas de sus hogares debido a las graves inundaciones en el Cono Sur americano. Paraguay es el país más afectado: el nivel del río Paraguay se sitúa en 7,84 metros a su paso por Asunción, la capital.
Son las peores inundaciones en cinco décadas.
En el noreste argentino se habla de unas 20.000 personas que tuvieron que abandonar sus hogares. Les siguen más de 16.000 en Uruguay y casi 2.000 en Brasil.
Mientras los gobiernos de Argentina, Uruguay y Brasil responden a las emergencias derivadas de las inundaciones, varios países vecinos han expresado su solidaridad para atender a los damnificados.
Paraguay agradeció este lunes el ofrecimiento del gobierno de Chile para cooperar en la asistencia a los damnificados. Ambos gobiernos acordaron que se elaborará un listado de las principales necesidades para activar la provisión rápida de la donación.
En un comunicado, la cancillería colombiana aseguró que su gobierno estará atento a la colaboración que pueda prestar, para ayudar a mitigar las necesidades de las poblaciones afectadas, según las prioridades de cada país.
El gobierno de Venezuela también expresó su voluntad de colaborar. La cancillería venezolana dijo en un comunicado que "reafirmamos el profundo vínculo que existe entre nuestros pueblos y manifestamos que pueden contar con la República Bolivariana de Venezuela, con su solidaridad, cooperación y amistad".
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